En nuestro país, la riqueza inmobiliaria de los hogares es 3,7 veces la financiera, llegando a ser de 9,2 veces en pleno boom de la burbuja. Todo el tema del mercado de la vivienda tiene gran importancia en la economía española y depende de cómo le vaya a la economía así va a funcionar el sector residencial.

Las cifras oficiales dejan claro que donde más crece el empleo es donde hay una mayor concentración de transacciones y esto no ocurre en todos los territorios. La mayor demanda de vivienda según Fotocasa está en seis provincias: Madrid, Barcelona, Valencia, Málaga, Alicante y Baleares.

En las dos grandes urbes hay un gran segmento de la población que no puede comprar en los barrios más céntricos y con mejores servicios e infraestructuras, que son los más caros, lo que hace que la demanda se desplace a los distritos más económicos.

Tinsa nos recuerda que fuera de las dos grandes ciudades, algunas localidades de sus áreas de influencia han pasado a ser un destino favorito de una generación de compradores que por su situación laboral no tiene necesidad imperiosa de vivir en el centro de la ciudad. Casos como el de Pozuelo, Coslada o Rivas, por ejemplo. En el caso de Barcelona, el Bajo Llobregat, El Garraf o Castelldefels y Sitges.

Existen capitales densamente pobladas como son Zaragoza, Málaga u otras de menor tamaño como pueden ser Almería, Vigo, Santander, San Sebastián u Oviedo. En estas los precios ha subido ligeramente, pero no se cree que esté volviendo a ocurrir una nueva burbuja.

Alquiler

En los últimos años alquilar un piso ha pasado se considerarse una forma más de tirar el dinero a una fórmula nueva para vivir con un grado mayor de movilidad y sin tener que estar atado a una hipoteca. En Madrid el distrito más demandado para alquilar continúa siendo Centro, aunque seguido de Carabanchel, Tetuán, Puente de Vallecas y Salamanca. En Barcelona, el preferido es l’Eixample, seguido por Ciutat Vella, Gràcia, Sant martí y Sants -Montjuic.

Inversión

Durante muchos años la vivienda se consideró un valor refugio, ya que solía estar presente el mantra que todos hemos oído alguna vez “La vivienda no bajará nunca”. Con la llegada de la crisis, cambió radicalmente la percepción que tenían hasta entonces muchos inversores. ¿Sigue siendo la vivienda actualmente una inversión segura?

Comprar una vivienda para alquilar es una oportunidad excelente, sobre todo si se compara con los tipos que actualmente ofrece la banca a los ahorradores. Es también una alternativa a la renta variable, de mayor volatilidad y que está sujeta a los shocks de los mercados.