Tu empleador tiene derecho a terminar tu contrato o cualquier otro tipo de relación laboral. Sin embargo, hay ciertas condiciones que deben cumplirse y la rescisión debe hacerse de forma justa. De lo contrario, puede resultar en un despido improcedente o inclusive nulo. El despido nulo es un término que hace referencia a cualquier tipo de despido en el que el empresario no cumple los requisitos mínimos para un despido válido. Y en este artículo lo analizaremos a fondo.

¿Qué es el despido nulo?

El despido nulo es la extinción unilateral por parte del empleador, de la relación laboral con un trabajador, en los casos en que el despido sea por causas discriminatorias según lo establece el artículo 14 de la constitución española. O que violen los derechos fundamentales del trabajador y/o sus libertades públicas.

Sin embargo, la calificación de despido nulo o de nulidad del despido, solo podrá ser determinada por un juez mediante sentencia judicial.

¿Qué causas pueden justificarlo?

El Estatuto de los Trabajadores de España en su artículo 55 apartado 5, establece que: “Será nulo el despido que tenga por móvil alguna de las causas de discriminación prohibidas en la Constitución o en la ley, o bien se produzca con violación de derechos fundamentales y libertades públicas del trabajador.”

Así mismo, también establece otros supuestos casos en los que el despido puede ser considerado nulo.

• Que el despido se haya producido durante los períodos de suspensión del contrato por causas relacionadas con el embarazo, la maternidad, la lactancia o alguna enfermedad derivada de ellas.
• En los casos en que la trabajadora objeto del despido esté embarazada, aunque la empresa no sepa de su embarazo.
• En los casos en que las personas trabajadoras hayan solicitado o estén disfrutando de alguno de los permisos a que se refieren los apartados 4, 5 y 6 del artículo 37.
• Cuando las personas trabajadoras hayan solicitado o estén disfrutando de un permiso a que se refiere el apartado 3 del artículo 46.
• Que el despido sea de una trabajadora víctima de violencia de género o de violencia sexual por causa del ejercicio de su derecho a la tutela judicial efectiva o de los derechos a la tutela efectiva reconocidos en la Ley o de su derecho a la seguridad social integral.
• Que el despido sea a un trabajador que se reincorpore al trabajo al término de un período interrumpido por parto, adopción o acogimiento. Siempre que no hayan transcurrido más de doce meses desde el nacimiento, la adopción o el acogimiento.

¿Qué consecuencias trae este despido?

En los casos en que el despido de un trabajador se califica como nulo, la consecuencia inmediata para el empleador es:

El reintegro inmediato del trabajador despedido a su antiguo puesto de trabajo en igualdad de condiciones a las existentes antes del despido.

La cancelación de los llamados salarios de tramitación o lo que es lo mismo, los salarios dejados de percibir durante el proceso.

Trámites para declarar un despido nulo

En términos generales cuando un trabajador sienta que es objeto de un despido injusto, improcedente o nulo, lo primero que debe hacer es:

Presentar papeleta de conciliación ante el Centro de Mediación, Arbitraje y Conciliación (CMAC).

En el caso de que la conciliación sea infructuosa, podrá acceder a la vía judicial e interponer una demanda laboral por despido nulo ante el Juzgado de lo Social de su provincia.

Una vez interpuesta la demanda deberá satisfacer los requerimientos del juzgado y esperar la decisión judicial.

El tribunal revisará el caso y decidirá si el despido fue válido o no. Si se basa en un motivo falso o ilegal, puede declarar el despido nulo.

Indemnización del trabajador en un despido nulo

En los casos en que el despido del trabajador sea calificado como nulo por la autoridad judicial, no aplica indemnización alguna para el trabajador. Al menos no por vía laboral.

Esto quiere decir, que queda la puerta abierta al trabajador para una posible reclamación civil por daños y/o perjuicios ocasionados por el despido. Este tipo de daños pueden ser materiales o morales y son indemnizables, pero solo por la vía civil.

¿Cuáles son las situaciones más frecuentes en los despidos nulos?

Las situaciones y las causas que pueden determinar la nulidad de un despido, pueden variar, de acuerdo al tipo de violación de los derechos fundamentales del trabajador o el tipo de discriminación. Veamos a continuación, algunas de las situaciones más comunes en las que se puede determinar que se ha producido un despido nulo. Estas pueden ser:

• Como consecuencia a la violación de los derechos fundamentales y libertades públicas del trabajador.
• Cuando los trabajadores sean despedidos durante el periodo de suspensión laboral del contrato. Bien sea, por maternidad, riesgo durante el embarazo o la lactancia. También en los casos de enfermedad derivada del embarazo, el parto o a la lactancia, adopción, acogida o paternidad.
• Cuando se despide una trabajadora embarazada en cualquier momento del embarazo.
• Por el despido de un trabajador que solicite o reciba una reducción de la jornada laboral debido al cuidado, la lactancia o la hospitalización de un hijo recién nacido
• Por el despido de un empleado tras reincorporarse al trabajo al término de un contrato de trabajo interrumpido por maternidad, adopción, acogimiento o paternidad.
• Un error oficial en el despido de trabajadores en el marco de un despido colectivo objetivo.
• Como consecuencia del despido de mujeres víctimas de violencia de género por ejercer su derecho a la reducción o modificación de la jornada laboral, a la movilidad geográfica, al cambio de lugar de trabajo o a la suspensión de empleo.