Una marca es un título que concede el derecho exclusivo a la utilización de un signo para la identificación de un producto o un servicio en el mercado, lo que le permite diferenciarse de sus competidores y reforzar las estrategias de publicidad.

Las marcas pueden tener muy diversas formas: palabras o combinaciones de palabras, imágenes, símbolos, figuras, gráficos, letras, cifras, formas tridimensionales (envases). En especial, pueden ser marcas:

1. Las palabras y combinaciones de palabras. Por ejemplo, Nike, Ford.
2. Las imágenes, figuras, símbolos y dibujos. Por ejemplo, el cocodrilo de Lacoste.
3. Las letras, cifras y sus combinaciones. Por ejemplo, BBVA.
4. Las formas tridimensionales (envoltorios y envases).
5. Los sonidos si se pueden representar de forma gráfica.

Por otro lado, no pueden registrarse como marca: los nombres genéricos, signos que describan los productos o servicios, indicadores de procedencia geográfica, signos contrarios al orden público o signos engañosos. Tampoco se pueden registrar signos idénticos o similares a marcas ya registradas.

En cuanto a las marcas debemos tener en cuenta que registrar una marca no es obligatorio, pero sí recomendable si se quieren proteger y asegurar los derechos derivados de esa marca, según detallamos en el siguiente apartado.

Prohibiciones respecto al uso de una marca

Según el artículo 34.1 de la Ley de Marcas el registro de la marca confiere a su titular el derecho exclusivo a utilizarla en el tráfico económico. En el apartado 3 del mismo artículo se regulan las prohibiciones para los terceros respecto a nuestra marca que son las siguientes:

• Que un tercero ponga nuestro signo o marca en sus productos o en la presentación de ellos.
• Que un tercero ofrezca, comercialice o almacene productos o preste servicios con nuestro signo distintivo.
• Que se importen o se exporten otros productos con nuestro signo o marca.
• Que utilicen nuestro signo o marca en documentos mercantiles y en publicidad.
• Que usen nuestra marca o signo en redes de comunicación telemáticas o como nombre de dominio.
• Que pongan nuestro signo en envoltorios, embalajes, etiquetas u otros medios de identificación u ornamentación del producto o servicio, elaborarlos.

Si un tercero realiza alguna de las acciones prohibidas detalladas anteriormente, está vulnerando nuestro derecho a la marca, por lo que como titulares de la misma podemos protegerla de las siguientes formas en la vía civil:

• Solicitando la cesación de los actos que violen nuestro derecho.
• Solicitando una indemnización de los daños y perjuicios.
• Solicitando que se adopten las medidas necesarias para evitar que siga la violación.
• Solicitando la destrucción o cesión con fines humanitarios de los productos ilícitamente identificados con la marca.
• Solicitando la atribución en propiedad de los productos embargados.
• Solicitando la publicación de la sentencia a costa del condenado.

La marca también se puede proteger por la vía penal. En el artículo 274 se establecen una serie de supuestos penados con penas de uno a cuatro años de prisión y multas para los que lleven a cabo una serie de conductas contra el derecho a la marca tasada por la ley penal.

No obstante, para obtener toda la protección de la marca que hemos detallado y ejercer las acciones comentadas, es necesario que la marca se encuentre inscrita en el correspondiente registro por el titular de la misma.