A medida que maduramos y que adquirimos experiencia en el mundo laboral comenzamos a valorar más los trabajos que nos hagan sentir bien y que nos aporten felicidad, aunque ganemos menos dinero.

Por lo general, solemos trabajar jornadas larguísimas para tener un buen sueldo a fin de mes, pero en el día a día no tenemos tiempo para nuestros hijos o amigos, lo que nos causa frustración e infelicidad.

Creemos que sí es posible ser feliz en el trabajo y te proponemos algunas reflexiones para que lo logres:

Trabaja en lo que realmente te gusta

Confucio decía: «Encuentra un trabajo que te guste y no tendrás que trabajar ni un solo día de tu vida.” Esta afirmación supone que cuando trabajamos en algo que nos apasiona, que nos llena, nos sentimos felices y el trabajo deja de serlo para convertirse en algo divertido y estimulante.

Lo importante es detectar qué es lo que realmente te gusta, qué haces bien. Piensa en esa habilidad especial que tienes y en eso que tanto te apasiona y elige un trabajo relacionado con tu pasión.

Aprende a ser flexible frente a los cambios

La vida es un continuo cambio y cuanto antes sepamos ver las oportunidades que suponen los cambios antes las aprovecharemos. Es muy humano tener miedo a los cambios, pero el miedo no debe ser paralizante sino estimulante.

Valora todo lo que haces bien

Si haces balance de tu vida profesional seguro que recuerdas los momentos negativos mucho mejor que los positivos. Es hora de valorar todo lo que haces bien, de reconocer tus propios logros y de premiarte.

Sé optimista y rodéate de personas positivas

Cuando hay una persona negativa cerca de ti seguro que la detectas muy rápido, todo lo ve mal, se queja, no aporta soluciones, sino que pone obstáculos y, sobre todo, transmite esa energía negativa y sientes como si redujera tu energía positiva.

Por ese motivo, es importante ser positivo en el trabajo, pensar en el lado bueno de las situaciones, ver a las personas con empatía y utilizar la inteligencia emocional a nuestro favor.

Reflexiona sobre ti mismo

Conocerte a ti mismo es una herramienta fundamental para ser feliz en el trabajo. Solo tú puedes saber qué es lo que haces bien y aquellos aspectos en los que necesitas ayuda o apoyo. El autoconocimiento y la reflexión son básicas para el éxito y la felicidad laboral.

Aprovecha el momento

En numerosas ocasiones nuestro miedo nos hace centrarnos en el futuro pensando en lo que pueda ocurrir y temiendo a la incertidumbre, lo que nos hace olvidarnos del aquí y el ahora, de disfrutar el presente. Por lo tanto, aprovecha el momento, exprímelo y disfrutaras de tu felicidad.