Desde que comenzara la crisis el precio de los coches nuevos disminuyó notoriamente. Sin embargo, desde 2014 y sobre todo en lo que va de año, los precios de los coches han aumentado mucho.

Un dato alarmante es que desde que comenzó el año 2017, en España los coches son un 0.3% más caros que el año pasado. Además, se prevé que los precios sigan subiendo. Sin duda los españoles que decidamos comprar un coche lo notaremos en nuestros bolsillos.

La subida alcanza a más sectores

Pero los coches nuevos no han sido los únicos que han experimentado la subida. La subida está presente en todo lo que tiene que ver con los automóviles. Tal y como se ha podido comprobar se han encarecido los precios de mantenimiento, las piezas necesarias para reparar el coche, etc.

Las motocicletas también han experimentado una subida de más del 2% respecto al mes de abril del año anterior. Asimismo, los coches de segunda mano también se han encarecido. Estas dos subidas de precio también son negativas ya que hay mucha gente que compra motos o coches de segunda mano.

Además, la mano de obra que es tan necesaria cuando tenemos un percance con nuestro coche también se ha encarecido bastante. Sin embargo, los carburantes no han experimentado esta subida ya que, si tenemos en cuenta el mes de abril del año anterior, podremos comprobar que los precios, este año, han bajado más de un 13% respecto al mismo mes del año anterior.

Esto podría hacer que la gente se piense dos veces el comprar un coche nuevo o que esperen a comprarlo unos meses para ver si la situación mejora. Esto, sin duda, podría ser algo totalmente negativo para la industria del automóvil y podría tener consecuencias nefastas.

Sin embargo, también se podría pensar que el que los precios suban podría ser un indicador de que la crisis está pasando y que la situación económica del país está mejorando. Aunque esto tendrá repercusiones negativas en las familias que deseen comprarse un coche nuevo a partir de ahora.

En resumen, desde que comenzara el año han subido los precios de los automóviles, las motocicletas, las piezas de repuesto, la mano de obra de las personas cualificadas para reparar nuestro coche, etc. Sin embargo, han descendido los precios de los carburantes y de los lubricantes respecto al mismo mes del año pasado. Todo ello sin duda, tendrá repercusiones en la economía de los españoles.