Cómo evitar que tu empresa muera de éxito
Emprender supone recorrer un camino muy complicado y a veces lo complicado no es llegar a tener éxito sino sobrevivir a ese éxito
Los emprendedores cometemos muchos errores y aprendemos de ellos porque de lo contrario cometeríamos continuamente los mismos fallos y eso es algo que no nos podemos permitir.
Una empresa puede morir de éxito por muchos motivos, y es importante conocer los más comunes para ir preparando nuestra empresa para esos casos y que no nos suceda como a otras empresas anteriormente que no han sido capaces de gestionar su éxito. A continuación, os exponemos algunos de los errores más comunes que cometen las empresas y que hacen que mueran de éxito:
No crear un sistema.
La base fundamental para que nuestra empresa crezca y pueda tener éxito es crear un sistema en todos los ámbitos de la misma: administrativo, ventas, marketing, gestión de clientes etc. Se trata de que cada departamento de la empresa tenga un sistema para saber actuar en cada caso y de que esa información sea compartida. De esa forma es posible delegar y saber que todo va a funcionar de forma correcta.
No tener capacidad de adaptación a los cambios.
A lo largo de nuestra vida empresarial vamos a vivir muchos cambios en nuestro sector y tenemos que saber adaptarnos para sobrevivir y seguir creciendo, porque de lo contrario corremos el peligro de alcanzar el éxito y no poder mantenernos. No podemos olvidar que los cambios actualmente con las nuevas tecnologías son constantes y muy rápidos, por lo que debemos ser previsores y estar siempre preparados para cambiar con rapidez si es necesario.
Evitar el debate y la tormenta de ideas en el equipo.
Uno de los aspectos que más favorece a las empresas para evitar morir de éxito es escuchar a sus trabajadores. Pero se debe escuchar de una forma activa y a trabajadores de todos los ámbitos de la empresa. Sus opiniones nos pueden dar ideas muy claras de en qué aspectos se puede mejorar y de qué forma.
Hacer todo uno mismo.
Aunque en un principio todo empresario que comienza intenta reducir gastos, a veces es importante dejar de hacer todo uno mismo porque llega un momento en que es imposible. No podemos hacer labores de gestión, administrativas y contables, además de dirigir la empresa, buscar clientes y seleccionar personal. Es necesario aprender a delegar, buscar personas en las que podamos confiar y que puedan hacer las labores que no sean absolutamente necesario que realicemos nosotros mismos.
Enfocarte en el producto o servicio en lugar de en el cliente.
Uno de los errores más comunes que nos puede hacer morir de éxito es enfocarnos en el producto y no en el cliente. Es fundamental escuchar al cliente, qué necesita, qué problemas tiene, de forma que podamos ofrecer una solución a una necesidad real. Por eso, antes de comenzar a trabajar en el producto o idea, es fundamental testearla con clientes potenciales, para conocer su interés.