El importe total de esta operación se basa en determinados ajustes previstos en el contrato de compraventa sobre una estimación del patrimonio neto de Barclays Bank a 31 de diciembre de 2014 de 1.714 millones de euros, según ha informado la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En este sentido, el importe a cuenta del precio se ajustará en función del patrimonio neto final de Barclays España, teniendo presente factores como las cuentas anuales, que se formularán y auditarán en las próximas semanas, así como los ajustes acordados en el contrato de compraventa.
Obtenidas las autorizaciones del Banco de España, de la CNMV y de la Comisión Nacional de Mercados y Competencia (CNMC), Barclays Bank se convierte así en la nueva filial del grupo Caixabank, al que aportará 550.000 clientes (principalmente de banca minorista y banca privada y personal), una red de 262 oficinas, cerca de 2.400 empleados y unos activos de 21.600 millones de euros.
A 30 de junio de 2014 Barclays Bank contaba con 18.400 millones de euros en préstamos netos, 9.900 millones de euros en depósitos de clientes y 4.900 millones de activos bajo gestión.
La entidad que preside Isidro Fainé prevé unas sinergias de costes anuales brutos de 150 millones de euros en 2016 y unos costes de reestructuración de 300 millones de euros netos de impuestos tras la adquisición de los negocios de banca minorista, gestión de patrimonios y banca corporativa de Barclays en España.
La entidad asegura que esta operación le permitirá mejorar su posición competitiva en segmentos y regiones clave, además de generar valor para el accionista.