Según este informe, el número de autónomos sin asalariados creció en España en 2012 por encima de la media europea, manteniéndose en la quinta posición con 2.025.800 autónomos por detrás de Polonia (2.239.400), Alemania (2.431.000), Reino Unido (3.495.200) e Italia (3.739.300).
El año 2012 se cerró para España con una tasa de crecimiento del 4,69%, tasa significativamente superior a la de de la Unión Europea 0,46%.
“El apoyo desde las instituciones, y sobre todo el acceso al crédito, será fundamental para que este nuevo tejido microempresarial consiga consolidarse como una parte sólida de nuestra estructura productiva”, subrayó Reyna.