De los 227 directores ejecutivos, en torno a la mitad se decantaron por el gigante asiático por delante de otras economías como Brasil, Rusia, India o Estados Unidos. Asimismo, el 70% de los encuestados y con operaciones activas en China aseguraron tener previsto incrementar las inversiones en este país durante los próximos cinco años.
Sin embargo, mientras la mayoría de las empresas de productos industriales eligen China para sus inversiones, los sectores tecnológicos y financieros optan más por Brasil.