Emprendedores e inversores comentaron los errores más graves que consideran del lado contrario para que su conocimiento permita fomentar la creación de empresas viables, consolidar su supervivencia y crecimiento, generar beneficios a los inversores y mejorar el ecosistema de las startups en nuestro país.

Errores al emprender según los inversores

1. El valor real de una idea no es tan elevado como intentan creer los emprendedores. Para un inversor la capacidad de ejecución y el talento global del equipo es el valor más buscado y el que menos abunda.
2. Los emprendedores no ponen el foco en el plan de negocio de la empresa. No analizan en profundidad su capacidad de escalabilidad y, aunque al acercarse a los inversores éste suele ser uno de los motivos fundamentales, los números no suelen estar realizados correctamente.
3. Empezar el proyecto con recursos propios, alcanzar unas ventas y un número de usuarios razonables antes de iniciar las diferentes rondas de inversión, es un punto de partida que muchos emprendedores no terminan de entender.
4. No dan la importancia necesaria a reunir el mejor talento dentro del equipo. Todos los integrantes deben compartir el modo de trabajo y tener una dedicación e implicación total, además de estar diversificados, permitiendo así crear un buen equipo.
5. Hay un alto número de emprendedores que están más preocupados en fomentar su marca personal que en formarse para tener una visión más empresarial, que les permita conocer si su empresa realmente va a ser rentable o si su proyecto tendrá recorrido.

Errores al emprender según los emprendedores

1. Para los emprendedores españoles los inversores son mayoritariamente cortoplacistas. Buscan la rentabilidad inmediata o fuerzan un ‘exit’ del proyecto sin proponerse mantener la financiación mientras crecen las compañías en volumen.
2. Falta una generación de inversores emprendedores, que una vez logrado un objetivo empresarial decidan dedicar parte de sus beneficios a generar líneas de crédito flexibles y financiar proyectos, donde prime el crecimiento global, aún sin haber lanzado un solo producto o servicio al mercado, frente a la búsqueda de unos beneficios inmediatos.
3. Faltan rondas de financiación más valientes, que permitan lanzar la compañía de una forma segura, sin necesidad de tener que estar permanentemente buscando nuevas vías de financiación, hasta poder iniciar la venta del servicio o del producto.
4. Un alto número de inversores está más preocupado en cómo disolver la unión para recuperar su inversión, que en generar mayor valor en la compañía para poder solventar etapas complicadas a lo largo del proyecto.
5. Los emprendedores creen que muchas veces el inversor va demasiado “a la defensiva”, frente al camino elegido por los fundadores.