Vamos a analizar algunos de los inconvenientes del trabajo en casa:

La soledad del autónomo y del emprendedor

Si hay una desventaja importante cuando trabajas desde casa, desde luego es esta: la soledad. Cuando estamos en una oficina con otros profesionales si tenemos un problema o una duda podemos consultar y buscar apoyo, pero si trabajamos en casa estaremos solos frente a los problemas del día a día.

La forma de vencer esta soledad es buscar a personas que estén en nuestra misma situación. Para ello, es aconsejable acudir a reuniones y eventos para emprendedores y entablar contactos que nos servirán no solo para vencer esa soledad sino también para sentar las bases de futuras colaboraciones.

Distracciones

Cuando se trabaja en una oficina es más difícil distraerse porque el ambiente nos ayuda a centrarnos en nuestro trabajo y, por lo tanto, seremos más productivos. Sin embargo, en casa hay miles de posibles distracciones que nos pueden hacer perder el ritmo de trabajo como internet, la televisión, el teléfono.

Lo mejor es buscar un lugar tranquilo e intentar alejarnos de todo lo que nos pueda distraer mientras trabajamos. Esto requerirá disciplina y autocontrol.

Imposibilidad de recibir a clientes

Es posible que en tu casa tengas un espacio adecuado y separado de la vivienda que utilices como oficina y puedas recibir a clientes, pero lo habitual es que no tengas un lugar para reunirte con tus clientes. La solución es acudir a las oficinas de las empresas con las que colaboras o alquilar salas en espacios de coworking.

Problemas con la tecnología

Si se te estropea el ordenador, la impresora o el móvil, tendrás que buscar tú solo una solución o pedir ayuda a un experto con el coste que ello supone. No todos somos expertos en tecnología y a veces cualquier problema se convierte en un mundo y nos hace perder un montón de tiempo.

Disponible las 24 horas

Otra de las desventajas o problemas de trabajar desde casa es que parece que no tenemos horarios y respondemos a correos a las 10 de la noche o un sábado y atendemos llamadas a deshoras, es decir, somos como una oficina abierta las 24 horas del día.

Falta de planificación y horarios

El hecho de que nadie controle nuestros horarios o lo que hacemos cada día, supone que está en nuestras manos gestionar nuestro tiempo y planificar tareas, porque de lo contrario no cumpliremos objetivos o nos agobiaremos con el exceso de trabajo.

Dificultad para trabajar en equipo

Si trabajas desde casa será complicado hacer tareas en equipo con otras personas. Las nuevas tecnologías son muy útiles, pero es complicado poder sustituir el cara a cara de una reunión. Esto no quiere decir que el trabajo en equipo sea imposible, simplemente que habrá que buscar herramientas y sistemas adaptados a la situación.